Nuestra historia

Mirando hacia adelante y con los pies firmemente plantados en el suelo.

QUIENES SOMOS

Nuestra empresa nació en Sermoneta, uno de los pueblos más bellos de Lazio, en 2003. En ese mismo año, después de mucha planificación, obtenemos la patente de la tapa mágica que dará vida a una nueva forma de cocinar. Todos nuestros productos están hechos en Italia y con la marca CE. A lo largo de los años, cada vez más personas han confiado en nosotros y han llevado la tapa Magic Cooker a sus cocinas.

Cocina Mágica

Una empresa en crecimiento

En 2013 nació la tapa cuadrada y en 2016 alcanzamos 1 millón de tapas vendidas y 5000 vendedores en toda Italia.

Mientras tanto, se han inaugurado otras plantas de producción, iniciando una cadena de suministro completa: del productor al consumidor. Actualmente nuestra empresa cuenta con una oficina de 5000 metros cuadrados y miles de distribuidores activos en la zona.

Mira cómo nació

su Magic Cooker®

Interesante visita al interior de la fábrica Magic Cooker ubicada en Latina. En este breve video, mostramos las distintas etapas de producción.

Contactos

Certificación de Giorgio Calabresi

Una cocina mágica

Prof. Giorgio Calabrese


Puedes utilizar la tecnología Magic Cooker que te permite freír a tan solo 97ºC y puedes reutilizar el aceite más de 5 veces para una fritura saludable, ya que sigue siendo de color claro, o puedes utilizarlo para sazonar ya que no absorbe sabores.


Durante la fritura, dice el prof. Calabrés, no habrá olor a fritura en el aire, esto es porque es un indicio de la presencia de acroleína, dado que el aceite alcanza su punto de humo solo a los 140ºC.


Estas afirmaciones han sido verificadas a través de los resultados de los análisis realizados por tres laboratorios diferentes, sobre el método de fritura realizado con el Magic Cooker en comparación con el tradicional.


Queríamos comprobar mediante pruebas de cocción específicas, si con el uso de la tapa Magic Cooker era posible reducir y/o ralentizar la formación de sustancias cancerígenas.



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    En las pruebas realizadas se eligió el aceite de oliva porque, al ser rico en ácidos monoinsaturados (más resistentes que los poliinsaturados) y sobre todo rico en sustancias antioxidantes, es el más resistente a la degradación por calor y por tanto habría aportado el más ejemplar en comparación con la medición de los efectos del sistema Magic Cooker. De hecho, los aceites de semillas, como el de girasol o el de maíz, comienzan a degradarse a temperaturas más bajas que el aceite de oliva, pero son los preferidos para freír porque tienen un sabor muy neutro en los alimentos, a diferencia del aceite de oliva que, sin embargo, es muy característico.

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